Tolkien y Café en la Libélula

Reseña por @ToGusDS

Pues después de una interesante lección de Quenya y una acalorada discusión acerca de la forma correcta de colocar una cita de un artículo encontrado en Internet, iniciamos la actividad de "Tolkien y café" el pasado 8 de marzo. Esta reunión fue especial ya que cada Tolkiendili leyó su pasaje favorito del primer libro de la trilogía de “El señor de los Anillos” del profesor Tolkien: “La comunidad del anillo”.

El primer fragmento fue leído por la presidenta Elanor. Su experiencia con este primer libro fue bastante interesante y es que su edición contiene un error de impresión bastante curioso: resulta que la narración de uno de los capítulos es interrumpida intempestivamente en un punto crucial de la historia. Leyó un poco del segundo capítulo y compartió que en un principio Frodo le caía mal porque “lo sentía como la segunda parte de el Hobbit”.

Luego, Ithildil leyó un fragmento del capítulo “Tres en compañía”, específicamente la parte donde Frodo vende Bolsón cerrado. De acuerdo a este Tolkiendili (y creo que no es una teoría que se pueda refutar), existía una gran incertidumbre ante el futuro de la misión, Gandalf parecía tener la esperanza de que alguien más llevaría el anillo al monte del destino. Creo que es importante mencionar que cierta persona no recordaban que Bolsón cerrado hubiera sido vendido y alguien más confeso que no había leído este capítulo.

Llegó el turno de Pedro de los Ángeles, quién compartió un fragmento de “Un cuchillo en la oscuridad”, cuando Aragorn cuenta a los Hobitts la historia de Beren y Luthien haciendo alusión a su parecido con la historia de Tristan e Isolda. Sin embargo, Jállalah defendió el origen de este pasaje que de acuerdo con el mismo Tolkien este (o estos) pasajes nacieron cuando en una ocasión en que su amada Edith bailó para él en una pradera.

Pedro, hizo una revelación importante y confesó que descubrió a Tolkien gracias a las películas, al igual que Baya y un servidor. Además, hizo su buena labor de difusión pidiendo a sus alumnos que leyeran dichos libros.

Posteriormente, fue el turno de Baya, quién leyó un pasaje que corresponde a “En Casa de Tom Bombaldi” y compartió la razón por la cual decidió nombrarse a sí misma Baya de Oro en honor a este personaje creado por el profesor. Y es que se siente identificada con esta singular mujer: a ambas les gusta cantar, son muy buenas anfitrionas, alegres aunque a la Tolkiendili le gustaría ser un poco más despreocupada. Además de esto Baya de oro es la primera mujer que se menciona en este libro del profesor.

Tocó mi turno, Gustavo en acción, en el cual leí dos pasajes: el primero perteneciente a “Lothlórien” (cabe mencionar que de acuerdo a los integrantes del Taller de Quenya, mi pronunciación de los nombres escritos en esta lengua fue bastante buena), pero este no era el capítulo que quería compartir, así que después de unos minutos de buscar otro pasaje, comencé la lectura del capitulo “El espejo de Lorien” y leí la descripción que hace Tolkien acerca de este hermoso bosque, ya que a pesar de las muchas omisiones y “revisiones” que hizo Peter Jackson para sus películas fue este pasaje el que permitió, a este joven e inexperto ToGus, crear una visión propia de la Tierra Media dejando de lado las películas que lo llevaron a conocer a este autor.

Después, Elanor tomó de nuevo la palabra, y nos compartió el pasaje que quedó interrumpido en su primera lectura de este libro. Debo reconocer que cuando leyó dicho fragmento todos comprendimos su reacción ya que el capítulo que se interrumpe se trata del primer encuentro cercano de los Hobbits con los jinetes negros. Esto provocó algo de frustración al no saber lo que había ocurrido, pero al mismo tiempo alentó a Elanor a continuar la lectura con tal de conocer la historia completa.

Finalmente, Jállalah leyó el pasaje más triste y emocionante de la primera parte de este libro el enfrentamiento entre el Balrog y Gandalf en “El puente de Khazad-dûm”, compartiendo que es para él el primer pasaje épico que escribe Tolkien para su trilogía.

Y eso fue todo por esta sesión, faltaron muchos, pero esperemos que la próxima ocasión nos acompañen para leer los pasajes favoritos de “Las dos Torres”.

Los esperamos el lunes 22 de marzo a las 19:30 pm en "Café la Libélula", ubicado en Álvaro Obregón No. 10 Col. Roma. cerca de Cuauthémoc y del metro Niños Héroes.